Estados Unidos.- La Administración Federal de Aviación (FAA) debe animarse si suspende todos los vuelos estadounidenses a Haití a posteriori de un incidente del 11 de noviembre en el que bandas haitianas atacaron un planeo de Spirit Airlines que intentaba aterrizar en el Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture en Puerto Príncipe. El planeo, procedente de Fort Lauderdale, resultó dañado por disparos, lo que llevó a los pilotos a desviar el avión al Aeropuerto Internacional del Cibao en Santiago, República Dominicana. Después de esto, otros dos vuelos entrantes asimismo fueron desviados y el aeropuerto Toussaint Louverture cerró temporalmente.

En respuesta a la ascensión de violencia, Spirit y American Airlines cancelaron vuelos a Haití al menos hasta el jueves, mientras que JetBlue suspendió su servicio hasta el 2 de diciembre. El Departamento de Estado de EE.UU. ya había emitido un aviso de Nivel 4 de “No viajar” para Haití, pero actualizó su advertencia a posteriori del incidente, reconociendo la creciente amenaza de que la violencia de pandillas afecte los viajes, incluidas las interrupciones en los aeropuertos. La Embajada de Estados Unidos en Puerto Príncipe asimismo redujo sus servicios el 12 de noviembre, citando la violencia en curso en la hacienda y cerca de la embajada, y recomendó a los viajeros que consideraran su seguridad personal antaño de intentar alucinar adentro de Haití.